domingo, 12 de febrero de 2012

LAS ULTIMAS VECES

El Antropólogo francés Marc Augé acuñó el término No Lugares para referirse a los lugares de transitoriedad que no tienen suficiente importancia para ser considerados como "lugares". Un no-lugar es una autopista, una habitación de hotel, un aeropuerto o un supermercado. Yo añadiria a estos No lugares dos que me ha tocado visitar por desgracia con cierta regularidad en estos últimos meses, los Hospitales y los Tanatorios, dos nolugares donde se mezcla la Vida y la Muerte, la Desgracia con la Esperanza, el Dolor y la Tristeza, el Vacío...la Soledad. En ambos tienes mucho tiempo para pensar, de pronto tu mente se pierde y escuchas las conversaciones de la gente..le llegó su hora...no sufrió...ya tenia 90 años...o con este frio no hay quien aguante, nos vamos todos a tomar por saco o esto son dos dias y que le quiten lo bailao.

En el micromundo de la muerte te emocionas cuando ves llorar a las personas que quieres o cuando en tu mente aparece nítido un recuerdo bueno que llega sin avisar a tu cabeza de la persona que se ha ido. Mientras esperas sentado a que las horas lentas pasen y el espectáculo se acabe recuerdas también a todas las personas que ya no juegan en la partida de Monopoly modo multijugador en la que vivimos, la Tristeza te invade y los suspiros sirven de poco mientras le doy vueltas a la frase de mi amiga Mabel...la Vida me está viviendo a mi...pue eso.

Siempre he pensado que la última vez que hacemos algo, deberíamos oir una campanita en nuestro interior que nos avisara (como cuando recibimos un mensaje de wasap) ... mira esta es la última vez que entras en esta casa, la última que te levantas, haces el amor o ves a esta persona, es la última vez que paseas por esta ciudad que tanto te gusta ,la última vez que montas en este coche, que te dicen te quiero, que te llaman por teléfono o te mandan un mensaje.
Las últimas veces deberian tener acuse de recibo, para estar preparado y disfrutar de ese momento efímero que ya sabes que no se volverá a repetir, deberíamos ser capaces de disfrutar todos los momentos hasta los más pequeños...todos aquellos que nos hacen felices...todos.

Y la muerte no tendrá Señorío,desnudos los cadáveres se habrán unido con el hombre del viento y la Luna del ocaso, cuando sus huesos estén rebañados y pulverizados, los limpios tendrán estrellas a sus codos y a sus pies. Aunque se vuelvan locos serán cuerdos, aunque se hundan en el mar emergerán de nuevo, aunque los amantes se pierdan el amor quedará y la muerte no tendrá Señorío...


Que Buda bendiga a mi Abuela Maria que nos dejó esta semana, al fantasma de Whitney que ya debe estar haciendo coros con la tia Amy y el tio Maiki vestidos todos por el tio Alexander,quizás ahora son más felices, que bendiga también a las señoras de la limpieza, a los hombres que regalan flores a otros hombres, a los que hacen más fácil la vida a los demás y son generosos con su tiempo, sus besazos y sus abrazazos...amén.

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