miércoles, 16 de abril de 2008

Okumura


Aunque en la calle sigue nevando
dentro del apartamento Gato se siente dichoso,tiene un sofá enorme solo para él y sabe que en unas horas la Señorita Okumura volverá del trabajo,lo meterá en su bolso(último modelo de Prada) y se irán por el barrio de Shibuya a dar una vuelta mientras fotografian a gente anónima con su Polaroid.De un salto sube al sofá y se acurruca tranquilamente en el lado izquierdo(su preferido),desde donde puede ver como la nieve golpea a veces el cristal haciendo un ruido como si alguien(desde el otro lado) arañara con cuidado la superficie de la ventana(como si ese alguien no quisiera ser descubierto)es un sonido inquietante pero agradable.Se queda terriblemente quieto,como en el modo desconexión(el que solo utiliza cuando está realmente cansado) y piensa en su dueña.
Sus ojos amarillos se quedan fijos en la pared blanca y entonces la ve,la Señorita Okumura vestida de verde, dobla jerseys tranquilamente, en su sección de la tienda.Está rodeada de gente elegante(y aburrida)que giran sobre ella y pasan a su lado(como si no existiera).La Emperatriz de los Helados ha venido de visita desde Italia y quizás hoy hay un revuelo poco común.Aunque es muy mayor(nadie sabe su edad) su cara parece la de una joven adolescente,aunque ya no se parece mucho a la mujer que aparece en la imagen corporativa.Nunca se rie y sus ojos están ligeramente rasgados,como si ella también fuese japonesa(o quisiera serlo).También viste de verde y se pasea tranquila con paso firme preguntando cosas a su legión de cortesanas que van unos pasos detrás de ella, alegres pero también temerosas(de su furia)como una procesión(infeliz) que deambula sin rumbo fijo buscando respuestas a la gran pregunta.
-Qué es la Felicidad-le preguntó la Señorita Okumura una vez al Oráculo del templo.
De su boca no salió nada esa vez ,pero ella acude semanalmente a que le responda.
(con Esperanza)

P.D-que nunca falte la Esperanza(aunque a veces sea muy puta) y la Vida no sea una cafeteria(ni siquiera un puto bar cutre de carretera)
P.D-besazos y abrazazos para todos

8 comentarios:

alterego dijo...

Es verdad Iluminado, que nunca falte la Esperanza. No es sólo la señorita Oukumura la que la necesita.
Saludos Iluminados.

Di dijo...

Y menos mal que es lo último que se pierde, porque ultimamente no sé donde tengo la cabeza y lo pierdo todo (y paso de tomar rabitos de pasa que seguro que engordan una barbaridad).

Besos iluminados

Laia dijo...

La Emperatriz de los Helados, el oráculo del templo, ¿es esta tu historia interminable? Pues que no se ponga la noche, que no se ponga, y que la señorita Okumura no se sienta tan sola entre la gente. besos amarillos y esperanza verde!

The Pilgrim dijo...

Debo estar especialmente sensible porque la foto me ha parecido casi peor que la del mono... he tenido que bajar corriendo con el ratón con los ojos semi-cerrados (tipo Gato) para leer sólo el texto, otro precioso capítulo de la señorita Okumura...

maestro Zen dice:

"Entre zapatos

y vestidos, buscando,

va la señora."

Pakithor dijo...

Acabo de descubrir tu blog y simplemente quería felicitarte por lo bien que escribes. Humildemente te digo que creo que la puntuación es lo que te falla un poco. Pero lo importante es lo que queda: el sentir.

Saludos.

BIRA dijo...

Pues yo, por si pierdo también la esperanza, sigo nadando, sigo nadando...

Besos, guapetón!

Anónimo dijo...

Como no tengo cuenta en gmail ni similares sigo de anónima, paraíso que me gusta muy de vez en cuando y que en los útimos tiempos que corren, o que van en adagio... no sé cuál será su tempo, preguntémosle también al oráculo... como decía, que en estos tiempos disfruto mucho del anonimato. Cuando se trabaja de cara al público, como le pasa a la señorita okumura, le da a una por paladear con especial placer aquellos momentos en que no es reconocida por un asíduo del local, por un cliente, un alumno... porque en el fondo el mundo es un pañuelo y todos nos terminamos conociendo y terminamos pensando y viendo a los demás desde nuestra posición, que vete a saber cuál será si cada uno somos de una manera. No sé si podría ser una persona superfamosa... La reina de los Helados, que tantos la conocen y ella apenas alcanzará a imaginar quienes pueden ser todos ellos. El caso es que mira por dónde me he puesto a divagar. Será la tarde de lluvia y frio, pero de primavera. La esperanza nunca se pierde... seguro que hay una historia que lo explica ¿Tiene que ver con Pandora..? Y ¿por qué verde? en fins, más preguntas para el oráculo. Gato, más vale wiskasbiónico en panza que ciento volando! a que sí! Bru, you are great!
Besos de marítima

Anónimo dijo...

Por fin estoy dispuesta a escribir en esta ventana de tu blog, desde donde quizás también vea nevar, aunque sólo sean puntos y comas... menos es nada. Me encanta la señorita Okumura y Gato (por un momento he llegado a pensar que estaba junto a mí, en el sofá, lamiéndose con pose de dandy y ojos somnolientos). No dejes de escribir porque con ello consigues sacar sonrisas, ohhhes! y oooles! y alguna que otra lágrima de las que te hacen sentir viva.

Besos.
P.D. yo también sigo nadando, sigo nadando...
Me he dado cuenta que aparezco como anónima, ´O_O`

Te quiero

anakarianakari